Aquí está. Luego de idas y venidas, por fin el reinado del clima tropical en Buenos Aires da paso a un tardio Otoño que mas parece invierno.
En consecuencia se pueden ver, casi con admiración, una presentación de bufandas, pulloveres y camperas por doquier. Desde cosas visiblemente compradas hasta hechas por abuelas (o de abuelas en algunos casos).
Aprovechando la mención de las bufandas, podría divagar el día de hoy -y como breve excusa para dejar de leer apuntes al menos 1 hora en este día contrareloj de estudio- sobre cierta prevención clásica para la salud en el invierno. Sueno bastante raro ahora que lo escribo, como un manual o artículo de revista de los años 50. En fin xD.
Como se puede observar en la imagen del señor Orejitas, poseo una interesante colección de bufandas. Esto radica en la funcionalidad de tener el cuello y pecho abrigados, sobre todo en las ventiscosas paradas de colectivos en la Panamericana. También, debo admitirlo, me gustan las bufandas xD.
Ahora bien, no todo es abrigo y calorcito de lana en mi vida. Mis pies están helados. Por más que tal afirmación asuste a las damas que esten en el espectro de futuras esposas (:P), debo decir que mis pies en la cucha son como 2 cubeteras. Sea en la cucha o en la casa/bondi/facultad, solo tengo 1 manera de mantenerlos calentitos: mantenerlos en movimiento. Casi una alegoria de la vida misma.
Tal vez deba conseguirme algunas botas de alpinista, para prevenir de raíz... ya que bien mis zapatillas o están valupeadas por la ineptitud de cierto alemán con el manejo de soldadoras oxidoacetilénicas con barras de aluminio (marca de quemadurá en el empeine que me quedará de por vida -.-), o bien poseen las
nunca pasadas de moda "aeroventilas".
Una vez expuestos estos temas, puedo traer nuevamente cosas habladas en una de las clases de sociología de ésta semana con respecto a la salud. Hoy en día, la definición de salud es "bienestar bio-psico-social", cosa que si bien nos da cuentas de que todos estamos enfermos (por innegables "injusticias sociales", aunque realmente no estoy seguro de cuan certero sea ese termino), a la vez me lleva a ver cuan estable podría estar psicologicamente.
Para no hacer esto una suerte de catarsis de un solo punto de vista y de corte "face emo" (A.K.A. comentarios *me corto me corto*), de los cuales quisiera pensar estar bastante alejado, debo tener en cuenta mi aficción por los desafios asi como mi plena parquedad superficial la mayor parte del tiempo ^^. Dos aspectos que pueden complementarse de cierta forma para una media más conveniente.
En lo que respecta a desafios, este mes los tiene por ambos frentes de lucha. El de los estudios y el de proyecto del Atelier, aunque hago en verdad la separación teórica para que se entiendan mejor, ya que en realidad el todo en conjunto es un proyecto personal.
Por el lado de estudio, se viene un Mayo y principio de Junio pleno de apuntes y parciales, lo que me recuerda que debo apurarme y terminar esto para seguir estudiando.
En el caso del Atelier, tengo el mes para preparar el proximo stand (de una manera completamente presentable y a la altura) para una convención que se llevará a cabo en Vicente Lopez el 9 y 10 de Junio. Tales preparativos, ya iniciados, demandan cierto empuje e inconciencia =P, como para estar alcanzando el proximo escalón en todo el proyecto. Puedo decir por lo pronto que tal es una apuesta en busca de una síntesis de las cosas anteriores.
En fin, sin mucho más que divagar por el momento, ahí se ven.
Ésta Freya me está llevando más de lo esperado (y calculado =.=")... espero estar terminandola en unas horas nomás, así poder tener un día por todos lados (Capital, Vicente Lopéz y Escobar) sin alguna otra preocupación en mente...
Ahi va la cosa. Gracias a mi asesora que me dice los colores de moda, y que quedan más que a tono con algunas de las imagenes que seleccione ésta vez. ^_^
