12.12.08

Límites

Nunca pude escribir diálogos. No me cerraban, eran forzados, no tenían sentido. Casi nunca puedo dialogar, ahí puede estar el problema. Casi siempre estoy hablando conmigo mismo. No me aburro. Pero me molesto.

Entonces, retomando una charla que tuve hace minutos, ¿cómo se hace para dejar de mandarse la misma mácana una y otra vez?. Conozco mi error, no me hace bien, pero no puedo dejar de hacerlo. Necesito otro empujón. O caer más duro.

O cosas menos trágicas, como ayuda profesional.

No hay comentarios.: